El Fin de los Tiempos

Cuando algo pasa en Roma, los misterios se multiplican. ¿Porqué ha decidido Benedicto XVI renunciar a su Misión como Papa? ¿Sabía ya lo que iba a decidir ahora, cuando en 2009 dejó su palio en la tumba de otro Papa, Celestino V, que abdicó también en el siglo XIII? ¿Porqué hay tantos "Benedictos" en la corta lista de Papas que dejaron su cargo antes de morir? ¿El rayo que cayó el 11 de febrero, pocas horas después de que el Papa comunicará su deseo de renunciar, es un signo del Cielo o del Demonio? (cf. artículo en el que se desarrollan estas preguntas).

  

En la madrugada del 20 de diciembre de 1962, se le oyó a Conchita González, hablando con la Virgen, que después del Papa reinante (Juan XXIII) ya solo quedaban tres Papas.

Cuando falleció Juan XXIII, el 3 de junio de 1963, en la cocina de su casa en Garabandal, volvió a repetir este sorprendente anuncio nuevamente a su madre, Aniceta: “ya sólo quedan tres Papas (...). En realidad me dijo que aún vendrían cuatro Papas pero que Ella no contaba uno de ellos”. Su madre le preguntó porqué. Conchita respondió: “Ella no lo dijo, solo me dijo que uno no le tenía en cuenta. Sin embargo me dijo que gobernaría la Iglesia por muy poco tiempo”.

Años más tarde, en una entrevista que le hicieron en 1977, Conchita aclaró: “la Virgen nos dijo que el Aviso y el Milagro serán las últimas advertencias o acontecimientos públicos que nos dará Dios. También dijo la Virgen que después del Papa que acababa de fallecer en ese momento (Juan XXIII), sólo quedaban tres Papas y luego vendría el fin de los tiempos. Es decir, el Aviso es como un anuncio del fin de los tiempos”.

La conclusión es clara: después de Juan XXIII son cuatro papas los que le han sucedido: Pablo VI, Juan Pablo I (que estuvo en la Sede Papal sólo 33 días), Juan Pablo II y Benedicto XVI. "Y luego -le dijo la Virgen a Conchita- vendrá el fin de los tiempos".

El Aviso y el Milagro, que se sucederán con menos de 12 meses de diferencia uno del otro, serán señales claras de que ya estaremos en el fin de los tiempos.

Después del 28 de febrero, cuando la Sede de Pedro quede vacante, tendremos la certeza, según las profecías anunciadas en Garabandal, de que estamos ya en el fin de los tiempos.

En la Sagrada Escritura y en muchos de los mensajes del Cielo recibidos por hombres y mujeres escogidos por Dios, el fin de los tiempos (o últimos tiempos) es la época que precede a la Segunda Venida de Jesucristo en gloria y majestad. Se caracterizará por la extensión generalizada de la apostasía, la aparición del Anticristo, la multiplicación de signos y sucesos naturales como terremotos, y también el surgimiento de un cisma en la Iglesia Católica y la instauración de la "abominación de la desolación", por el Falso Profeta, que perseguirá a la Iglesia remanente, fiel a las Enseñanzas de Jesús.

Algunos estudiosos de todo esto, que han analizado cuidadosamente la cuestión, afirman que, en consonancia con las profecías de San Malaquías (del año 1139, en Roma), hemos llegado al momento esperado durante tantos siglos. El próximo Papa o el siguiente (depende de como se interprete la última parte de la profecía) será el último Papa, antes de la Segunda Venida del Señor. El texto es el siguiente: "En la persecución final contra la Santa Iglesia Romana reinará Pedro Romano, quien pastoreará a su grey en medio de muchas tribulaciones. Después de esto, la ciudad de las siete colinas será destruida y el Juez justo volverá para juzgar a su pueblo". 

Por otra parte, en las profecías recibidas por María Divine Mercy, que trasmitimos resumidas en este blog cada semana, muchas veces aparece claro que Benedicto XVI será el último Papa legítimo. Veamos algunos ejemplos:

16 nov 2010: "I ask you all to pray for My beloved brave Pope, the last true Pope" ("Te pido que reces por Mi querido y valiente Papa, el último Papa verdadero").

1 jun 2011: "My beloved Vicar’s days are now numbered. He will have left The Vatican before The Warning takes place" ("Los días de Mi amado Vicario ahora están contados. Él dejará El Vaticano antes de que tenga lugar El Aviso").

7 jun 2011: "My Holy Vicar Pope Benedict needs your prayers (...). It is important that My followers keep alert to any new Pope that may come forward for he will not be from God" ("Mi Santo Vicario, el Papa Benedicto, necesita vuestras oraciones (...). Es importante que Mis seguidores se mantengan alerta ante cualquier nuevo Papa que pueda venir después, pues él no procederá de Dios"). 

12 abr 2012: "My beloved Pope Benedict XVI is the last true Pope on this earth. Peter the Roman, is My Peter, the original apostle who will rule My Church from the Heavens under the command of My Eternal Father (...). They, My daughter, are being sent to prepare God’s children to accept the next Pope, who comes after My beloved Vicar Pope Benedict. This Pope may be elected by members within the Catholic Church but he will be the False Prophet." (Mi amado Papa Benedicto XVI es el último verdadero Papa en esta tierra. Pedro el Romano [se refiere a la profecía de San Malaquías], es Mi Pedro, el apóstol original, que gobernará Mi Iglesia desde los Cielos bajo el mando de Mi padre Eterno(...). Ellos [se refiere a los seguidores de Satanás] han sido enviados para preparar a los hijos de Dios a aceptar el próximo Papa, que vendrá después de Mi amado Vicario el Papa Benedicto. Este Papa puede ser elegido por miembros dentro de la Iglesia Católica, pero él será el Falso Profeta").

13 nov 2012: "Pope Benedict will suffer much as he will be persecuted for speaking the Truth. He will be crushed, as Head of My Church, and no mercy will be shown to him. The opposition will mount quickly as he will be declared no longer relevant" ("El papa Benedicto sufrirá mucho pues será perseguido por decir la Verdad. Será aplastado, como Cabeza de Mi Iglesia, y no se le concederá misericordia alguna. La oposición se organizará pronto, al ser declarado que ya no es relevante").

Son misteriosas estas profecías. Habrá que estar atentos a los mensajes que reciba Maria Divine Mercy en estas próximas semanas (cf. The Warning y El Aviso de Dios), además de pedir mucho al Espíritu Santo el don del discernimiento, para saber distinguir entre lo que es verdadero o no.

Es un misterio también que el Papa haya escogido la fiesta de Nuestra Señora de Lourdes, para anunciar su renuncia. ¿Habrá sido porque se siente necesitado de curación y de protección mariana? En el año 2000, interrogado por el periodista Peter Seewald, Benedicto XVI comentó que después de leer biografía de Santa Bernardette, escrita por Franz Werfel, la historia sobre Lourdes ha llegado a ser algo muy querido para él. "Mientras más viejo soy -comentaba el Papa- la Madre de Dios es más importante para mí y la siento más cercana".

En las próximas semanas la Iglesia ora intensamente por el Papa. Comenzamos la Cuaresma, un tiempo de penitencia y purificación. Y le pedimos a Nuestra Madre que prepare un camino seguro para todos sus hijos, nos consiga la alegría de la  perseverancia firme en la fe de Jesucristo, y nos proteja de todo mal.